Procura llevar las riendas de tu vida, pero, cuando sea la vida la que te arrastre, procura encajar los golpes.
Depresión
Aumento de actividad física y social
Participe en actividades que le hagan sentirse mejor. Por ejemplo, ir al cine, ir al teatro, salir a caminar por un parque, tomar la bicicleta para dar un paseo, realizar una visita sorpresa a un amigo o pariente, o cualquier otra cosa que lo entretenga o divierta. No se agobie la mejoría en su estado de ánimo será gradual. Ver la televisión y realizar las tareas domésticas no se incluyen en este tipo de actividades.
Hacer ejercicio
Cuando se está deprimido es normal estar más pasivo, cayendo en un círculo vicioso de baja autoestima e inactividad, pobre auto imagen, sentimiento de indiferencia y rechazo. Romper ese círculo cuesta un esfuerzo. Fíjese prioridades y haga hasta donde le sea posible. Lo importante es comenzar, y aprovechar el apoyo de otras personas, salir a caminar en compañía es un buen comienzo. Comience ya, no lo postergue más. El aumento de actividad física de cualquier tipo le va a traer beneficios psicológicos.
Nuevos intereses y actividades
Busque un hobby que le haga sentir realizado, algo que le apasione. Algunos hobbies son: colecciones, bricolaje, manualidades, decoración, y por supuesto los deportes, bailar...
Evite hablar sólo de la depresión
Una cosa es desahogarse y otra que se convierta en un tema recurrente, es mejor distraerse de la tristeza. Hable de otros temas más positivos: de anecdotas divertidas, del tiempo, de deportes o de las noticias.
Círculo social
Apoyese en sus amigos íntimos, personas en las que pueda confiar, que sepan escuchar y que sean divertidas. Personas así representa un factor protector contra la depresión, y contra el pensamiento distorsionado que la acompaña.
Utilice la musicoterapia
Escuche canciones positivas, marchosas, que le ayuden a salir adelante y le den fuerzas. Baile, cante a gritos, salte, eche fuera su tristeza.
Tome el sol
Además de aportarle vitamina D el sol es un gran aliado que le ayudará a luchar contra la depresión, la luz solar incide en ciertas actividades del cerebro que tienen que ver con el humor de las personas. La explicación es que los rayos UV aumentan la producción de un neurotrasmisor , llamado serotonina, que está relacionado con la sensación de bienestar, la regulación del sueño, la temperatura del cuerpo y la conducta sexual.
Es fácil navegar cuando el mar está en calma, pero en la tormenta es donde se forja un gran marino.
Escuche lo que Rocky le dice a su hijo sobre la vida y siga su consejo
“...y fuiste creciendo cada vez más estupendo. Era fantástico poder observarte, un privilegio. Y cuando te llegó el momento de hacerte un hombre y afrontar el mundo, lo hiciste. Pero en algún momento del trayecto cambiaste. Dejaste de ser tú. Permitiste que te señalaran y que te dijeran que no sirves. Y cuando empeoró todo buscaste a quién echarle la culpa, a una sombra alargada. Voy a decirte algo que tú ya sabes, el mundo no es todo alegría y color. Es un lugar terrible y por muy duro que seas es capaz de arrodillarte a golpes y tenerte sometido permanentemente si no se lo impides. Ni tú, ni yo, ni nadie golpea más fuerte que la vida. Pero no importa lo fuerte que golpeas sino lo fuerte que pueden golpearte. Y lo aguantas mientras avanzas. Hay que soportar sin dejar de avanzar. Así es como se gana. Si tu sabes lo que vales ve y consigue lo que mereces pero tendrás que soportar los golpes. Y no puedes estar diciendo que no estás donde querías llegar por culpa de él , de ella, ni de nadie. Eso lo hacen los cobardes y tú no lo eres. Tú eres capaz de todo. ...”
Hay un proverbio ruso que dice “caer está permitido, levantarse es obligatorio”.
Todos necesitamos una motivación para vivir, luchar por lo que queremos, encontrar lo que nos apasione. Es nuestra responsabilidad encontrar el sentido de nuestra vida. A veces tenemos un trabajo que nos hastía y gastamos todas nuestras energías en quejarnos. Pero por miedo, no buscamos otro, no luchamos por la felicidad.
En tiempos de crisis la cosa se complica aún más, hay más miedo y por tanto todos estamos más paralizados y es más difícil encontrar nuestro camino.
En ocasiones la vida nos enfrenta con dificultades, a veces nos golpea tan fuerte que nos quedamos tirados en el suelo y nos sentimos incapaces de levantarnos. No encontramos la fuerza, ni los recursos, nos quedamos ahí abatidos.
Los que han sufrido una depresión saben lo que es, ven como su vida se va deteriorando poco a poco e ignoran qué hacer para pararlo. Es como hundirte en el mar, cada vez caes más y más y no sabes cuando tocarás fondo. Pero el fondo llega y cuando lo tocas coges fuerza para subir hacia la superficie.
La depresión es tu enemigo, para enfrentarlo necesitas actuar como un guerrero, con fuerza, coraje y valentía. Pero para ganar la batalla es importante conocer al enemigo y encontrar las estrategias necesarias para vencerlo. Es tu batalla, tendrás que buscar apoyos, pero nadie va a andar tu camino, ni luchará tu guerra. Eso lo tienes que hacer tú.
Y cuando todo acabe, porque acabará. Cuando salgas victorioso, serás más fuerte, más sensible, sacarás lo mejor de ti, tendrás más recursos para enfrentar el futuro. Incluso serás capaz de ayudar a otros que pasen por donde tu pasaste, y venciste. En definitiva te alegrarás de haber pasado por esto porque te darás cuenta de que eres otra persona, e incluso le darás las gracias por haberte convertido en alguien mejor. Y sobretodo porque le habrás encontrado el sentido al sufrimiento.
Y piensa que aunque parezca imposible siempre podemos encontrar la fuerza para salir adelante.
Imagen "saxofonista" cedida por el artísta Javier Miguel Pérez.